El alcalde de Novelda, Armando Esteve, ha anunciado que el Ecoalbergue de La Mola estará en funcionamiento antes de final de año, una vez que el equipo de gobierno apruebe, en la sesión plenaria de la próxima semana, el pliego de condiciones para la concesión de la explotación de las instalaciones.
Cinco años después de la finalización de las obras y tras varias actuaciones que permitieron dotar al recinto de agua potable y solucionar otros pequeños problemas, el Ayuntamiento de Novelda aprobará en unos días el pliego de condiciones que permitirá, mediante procedimiento abierto, adjudicar la explotación de un albergue que, según el alcalde, “es un recinto ideal, una joyita, que puede convertirse en punto de referencia de la comarca, supondrá un atractivo turístico más en Novelda y creará empleo y riqueza”.
El pliego de condiciones para la explotación del Albergue de La Mola, ubicado junto al Bien de Interés Cultural del Castillo y el Santuario de Santa María Magdalena, establece una licitación mínima de 7.000 euros anuales por un periodo de doce años prorrogable otros seis y contempla no solo el alojamiento y manutención sino también la oferta de actividades complementarias como excursiones, eventos, cursos y demás relacionados con la naturaleza, turismo o patrimonio histórico cultural, que podrán ser dirigidos a los escolares y otros colectivos. Según el concejal de Medio Ambiente, Francisco Javier Cantos, se trata de “poner en marcha un elemento dinamizador que ayude a potenciar las visitas al municipio y sirva para mejorar el conocimiento social, cultural, turístico, histórico, patrimonial y medioambiental de Novelda”.
El Ecoalbergue
Ubicado en antiguo convento de las Dominicas Oblatas, entre el Santuario de Santa María Magdalena y el recinto almohade que acoge la Torre de Tres Picos, declarado Bien de Interés Cultural, el Albergue tiene capacidad máxima de 48 plazas en residencia y cuenta con recepción de visitantes, bar-restaurante, centro de interpretación, sala de descanso, sala multiusos, aula de proyecciones, despachos, aseos completamente equipados y adaptados y zona de lavadero. La obra, finalizada hace más de cinco años con una inversión de casi 700.000 euros procedentes de los fondos estatales del segundo Plan E, se realizó siguiendo criterios de sostenibilidad, utilizando materiales ecológicos y sistemas que permiten la reducción en la generación de residuos y la utilización de energías renovables.